Salta

Es una provincia situada en el noroeste de la Argentina. Hacia el norte limita con Jujuy (en el norte y noroeste), tiene frontera internacional con Bolivia (en el norte) y una pequeña franja fronteriza con Paraguay (en el noreste). Por el sur está rodeada de las provincias de Catamarca, Tucumán y Santiago del Estero, y por el este con Chaco y Formosa. Y por el oeste tiene límite internacional con Chile.

Una característica sobresaliente es la diversidad de relieves y climas que posee, por lo cual al visitarla se pueden encontrar paisajes muy variados:
— Puna: se ubica en el oeste y corresponde a una meseta árida y elevada de la cordillera andina. Se trata de una zona poco poblada y con varios salares. Es habitual observar fauna andina como por ejemplo vicuñas (un camélido autóctono sudamericano).
— Cordillera Occidental y Oriental: son cordones montañosos con cumbres elevadas. En la Cordillera Oriental aparecen valles y quebradas como la quebrada del Toro, los valles Calchaquíes y el valle de Lerma.
— Yungas: se ubican en las laderas orientales de las sierras subandinas, dentro del sector oriental de la provincia. Se presentan como selvas húmedas montañosas. Se caracterizan por su gran biodiversidad y son un sitio óptimo para quienes les interesa la observación de fauna silvestre.
— Chaco salteño: ocupa el este y corresponde a una llanura con vegetación de tipo chaqueño. Es una subregión del llamado Gran Chaco.

Esta variedad geográfica se refleja en la diversidad de destinos turísticos que ofrece su territorio:
— San Antonio de los Cobres: allí está la estación de donde sale el imperdible Tren a las Nubes (se puede contratar una excursión desde la ciudad de Salta). Se hace un paseo que llega hasta el viaducto La Polvorilla, que con 4536 m s.n.m. es el cuarto ferrocarril en el mundo por la altura que alcanza.
— Ciudad de Salta: es la capital y mayor población de la provincia. Cuenta con una red de museos para visitar, y es imperdible la visita del cerro San Bernardo al que se puede acceder a su cima con un teleférico.
— Cafayate: un destino popular para turistas. Desde allí, tomando la ruta nacional 68 se puede recorrer la quebrada de las Conchas donde se aprecian paisajes de colores rojizos con geoformas.
— Parque nacional Los Cardones: un área natural protegida con opciones para hacer recorridos y observar sus atractivos, entre lo que se destacan extensiones con cardones, algunos de gran tamaño.
— Iruya: una localidad única por su aspecto original, situada en la ladera de una montaña.
— Parque nacional El Rey: está en las yungas. Tiene una variedad de senderos para recorrerlo y es un buen sitio para ver fauna silvestre como mamíferos.

Con respecto a la gastronomía son típicas las empanadas salteñas, humitas y el locro. Las llamadas "peñas" son habituales, donde se puede cenar mientras se disfruta de música regional en vivo.

Para llegar a la provincia de Salta:
a) En automóvil: hay diferentes rutas asfaltadas que la conectan desde distintos puntos de la Argentina:
— Ruta nacional 9: comunica al norte con Jujuy pasando por San Salvador de Jujuy hasta La Quiaca, y al sur con provincias y ciudades como San Miguel de Tucumán, Córdoba, Rosario e incluso hasta la capital Buenos Aires.
— Ruta nacional 40: es una carretera escénica que recorre el oeste del país y permite acceder a imponentes lugares turísticos. Se extiende desde el extremo norte por la Puna jujeña, atraviesa diferentes provincias y termina por el sur argentino en la provincia de Santa Cruz.
— Hay otras rutas nacionales más, como ser la 81 que conecta con Formosa, la 34 que la une con Santiago del Estero y Santa Fe, y la 16 con Chaco.
b) En avión: al aeropuerto internacional Martín Miguel de Güemes llegan vuelos diarios desde la ciudad de Buenos Aires. También es común que haya desde otros destinos, aunque se debe chequear si están operando y frecuencia, como por ejemplo de Córdoba, Mendoza, Neuquén y otros más.

Con respecto a cuándo visitar Salta, se aconseja ir en primavera, otoño y llevando un abrigo en invierno. A medida que nos acercamos a mitad de año (invierno) el clima tiende a ser más seco, soleado y baja la temperatura, llegando a hacer mucho frío sobre todo en las zonas elevadas. Por el contrario, el verano es la época húmeda y hay sitios donde puede llover mucho, y hasta puede ocurrir que se complique los accesos por crecidas de cursos de agua o deterioro de caminos.